Por: Luis Medina Lizalde
Con la victoria de las fuerzas aglutinadas por López Obrador se propina un severo golpe al corrupto esquema de captura del voto ciudadano desde el gobierno, pero eso no disipa el riesgo de que el juego sea el mismo aunque con distintos jugadores, las elecciones de este año indicarán si los hábitos del fraude van en retirada.
Morena se juega su futuro en la congruencia con su ideario democrático, debe impedir que en sus filas se imponga el clientelismo derivado de programas sociales, la utilización partidista de empleados públicos el financiamiento con fondos públicos de actos de “placeo” y demás formas deshonestas acostumbradas durante la prolongada vigencia del viejo régimen, de lo contrario se convertirá en una pandilla política más de las que se reparten el territorio.
El PRI nació llamándose PNR y desde el primer día tuvo el control territorial absoluto. En estos momentos mantiene su hegemonía en la mayoría de los municipios y lidera en número de gobiernos de los estados empatado con el PAN (12 estados cada uno).
Morena se hace del poder federal contando apenas con cuatro estados a los que muy probablemente añada dos en las elecciones de este año. Eso habla de que en el plano nacional los gobiernos de partidos adversarios de Morena disponen de más territorio controlado para intervenir en elecciones desviando recursos desde dependencias tipo DIF, Secretaría del Campo, etcétera.
En los municipios la desventaja de Morena si quisiera operar fraudulentamente es aún mayor en estados donde gobierna, como Zacatecas: 18 ayuntamientos corresponden al PRI, 11 al PAN, ocho a Morena, seis al PRD, cinco a Nueva Alianza, cuatro al PVEM, tres al PT, dos a MC y uno al partido local PAZ.
La corrupta intervención desde el gobierno en la historia electoral de los últimos 30 años registra en Zacatecas una cuantiosa fuga de recursos públicos cuyos efectos acumulados en mucho explican la crisis local de las finanzas públicas.
La toma de conciencia de amplias franjas ciudadanas constituye la más sólida esperanza de que transitemos a elecciones más acordes con la lógica democrática y no se imponga la guerra de tramposos acostumbrada
ASÍ SE NOS EDUCÓ
La cultura política de los mexicanos normalizó el proceso de gestación de candidaturas “desde arriba”, que popularizó vocablos como “palomeo”, “dedazo”, “placeo”, “cargada” y convirtió en expresión de uso corriente lo de “Murió el Rey, viva el Rey”
La cultura contraria, la que preconiza la pluralidad, la legalidad y la gestación democrática de los gobernantes tendrá que ganar todavía muchas batallas. Así como al triunfo de la Independencia de México subió a escena la lucha entre monárquicos y republicanos, o como concluida la fase armada de la Revolución los Constituyentes de 1917 debatieron entre restaurar la visión de la Constitución liberal de 1857 o la de los derechos sociales, hoy, con la contundente victoria de López Obrador sube a escena la pugna entre la sobrevivencia de los componentes de corrupción y autoritarismo del viejo régimen y la visión que busca la instauración de la política como servicio a los demás y que hace de la honestidad su más caro principio. La pugna de los contrarios recorre todos los partidos, todas las formas de pensar la política, todos los niveles sociales pero esta lucha de los opuestos tienen hoy en Morena su escaparate principal, el reto es grande porque la Cuarta Transformación no puede apartar su destino del desenlace. LA PUGNA DE LOS CONTRARIOS Dos audios delatores y el nada disimulado “placeo” del coordinador del programa ganadero, aspirante a candidato, permiten apreciar la sobrevivencia de la cultura que inoculó el priísmo en los mexicanos, si el de la doctora Sonia Ruiz revela la instrumentación facciosa de una minoría de “siervos de la nación” (La mayoría de ellos no comparte esa política voluntariamente). El Audio de Maribel Villalpando Haro, coordinadora regional de programas sociales del Gobierno Federal, es el más nítido espejo de la cultura del pasado que se niega a morir, en su intervención dada a conocer por “Espacio Abierto” de Estéreo Plata, se anticipa una estrategia de captura del partido desde el gobierno que si culminara con éxito, haría de Morena una caricatura de “partido de estado” comparado con lo que fue el PRI. Morena es escenario principal, no único, del choque de visiones de cuyo desenlace depende el futuro político del país, para eso son las ideas, para que se confronten y se depuren en democracia Ni es sólo en Morena, ni es sólo en Zacatecas. Nos encontramos en el Recreo @luismedinalizalde@gmail.com
