Por: Eva Gaytán

Hace cuatro o cinco días que no la miro sentadita en su ventana, si no la miraste hoy, ahí la mirarás mañana…

No… Momento… Se me enredó la pita, no me acordaba si iba a escribir una opinión o me iba a echar unos mezcales zacatecanos.

En fin, ya me acordé y aquí les voy:

Iniciaré con El Mijis:

Hace cuatro o cinco días inició un desbarajuste en redes sociales, porque ¡Sácatelas! Un ex cholo (o cholo vigente) ganó una diputación en San Luis Potosí; yo había escuchado que si el men era cholo, que si el vato era asesino, que si el morrito era ladrón, que si el homie era delincuente, que si los tatuajes, que si los compas… y así.

Al principio dudé, pero conforme fui leyendo acerca del compa (obviamente en el interné) ¡Tómala Cochino! Pues me pasaron a callar el hocico, en efecto fue un cholo, en efecto presuntamente hirió a 4 personas, en efecto fue pandillero y en efecto se ha dedicado desde hace poco menos de 10 años a realizar labor social con pandilleros de diversos estados del país. Chistoso eso no lo mencionaron quienes lo crucificaron en redes sociales.

No sé ustedes, pero yo he sido objeto de discriminación por chingos de cosas. Discriminación que en chingos de ocasiones la gente ve como normal y la justifican con “es su trabajo”, he entrado en tiendas de verdadero alto pedo y no me atienden, he acudido a restaurantes de verdadero alto pedo y me ven chiquita a pesar de mi tamañote, he sido rechazada en trabajos por usar tenis, por gorda, por pelona, porque no uso ropa currita, en pocas palabras he sido discriminada por ser distinta a la imagen que en teoría debe tener una mujer.

No es chido, no se siente bien y en efecto al igual que “El Mijis” se me haría poca madre que todos fuésemos tratados de acuerdo a nuestras capacidades, logros y errores. Situación que lamentablemente no ocurre.

Si este homie pretende seguir haciendo las cosas bien y, quizá no enmendar sus errores, pero sí aprender y enseñar desde los mismos, está con madres, pero está más con madres que su idea sea trabajar por la no discriminación y en una de esas por una verdadera reinserción de quienes se han visto envuelto en felonías.

La Lula

Así bien chispa, vi a muchas personas rasgando sus vestiduras por la crítica que se hizo de “El Mijis” y neta sí, acepto fui una de las que criticó esa elección, misma que usted, querido lector pensará: “¿y a esta wey qué le importa?” y sí en efecto, yo ni soy de SLP pero, ps ya saqué mi cuchara.

Hay otro tipo de discriminaciones que se dan y que en serio ésas ni en cuenta las toman. Me refiero a los juicios que muchos hicieron en campañas debido a las decisiones de amigos y conocidos acerca del candidato a quien se apoyaría.

Si no era AMLO eras pendejo y te gustaba que te chingaran; si no era Mid eras pendejo y te gusta la anarquía; si no era Anaya eras pendejo y no entendías que era el único que podía ganarle a AMLO, si no era el Bronco eras pendejo y no entendías que un candidato independiente era la única solución.

Yo misma fui una discriminadora.

Nos hemos metido en la cabezota que todo lo relacionado con el PRI está mal, TODO. Sí coincido en que al igual que El Mijis han tenido hartos errores, unos harto graves pero ¿qué creen?

En los andares de la vida me topé con una priísta espectacular, que al igual que el diputado electo de SLP, me calló el hocico, como se debe hacer: con su trabajo; me refiero a Lula de la Rosa, ¿cómo fue?, no sé decirles cómo fue, no sé explicarles qué pasó pero de ella me enamoré.

En verdad al conocerla y tratarla reconocí en ella a una mujer honesta, fuerte, trabajadora, inteligente y capaz.

Es lamentable que en el afán de apoyar a un partido, los zacatecanos perdieran la oportunidad de tener una verdadera representante en el congreso local y a cambio pusieran a una mujer que se ha caracterizado por sus abusos, ignorancia y discriminación por todo y todos.

Es más, lo verdaderamente lamentable es que ni si quiera se dieran cuenta que frente a ellos tenían a un SER HUMANO excepcional que traía las siglas del PRI y la cambiaran por alguien que con sus hechos y palabras ha demostrado que sólo se importa ella misma, sus intereses y los de su familia.

En ambos casos, no me la contaron, yo lo vi, lo viví y comprobé.

El Tello

Algo que me ha llamado la atención y que de plano me sorprende es que no he visto un reconocimiento real a la forma en que se condujo Alejandro Tello Cristerna.

Preguntará usted, ínclito lector, ¿acaso Tello estaba en campaña? Y la respuesta es: absolutamente NO, no sea baboso pos claro que no andaba, a poco lo vio, pos no verdá?; sin embargo estamos acostumbrados a que siempre se meta la mano en los procesos electorales tanto así que criticamos los resultados cuando no son convenientes a nuestro deseos y cuando lo son los vemos pasar.

En efecto, los resultados fueron en cascada en beneficio para Morena, lo que implica, por añadidura, que el PRI, partido por el cual Tello fue gober, pos no ganó y en verdad las manos del gober se mantuvieron quietas y respetuosas de la decisión ciudadana.

He escuchado comentarios que denostan al gober en el sentido de “pos es que no le quedaba de otra” y otros más piores.

El comentario correcto no debe ser “¡Ah, no pinches mames! A diferencia de los otros éste sí dejó que el agua corriera como debía” o “Hizo lo que tenía que hacer”.

Neta los resultados, en su mayoría, me disgustaron pero me dio harto gusto ver que chingos de gente votó, que nadie en el poder metió las manos y que todos absolutamente todos los candidatos reconocieron los resultados y el triunfo de los contrarios.

Lo que no me da gusto es que mejor los otros han levantado la mano pa decir: “El Tello es chido y no usó el aparato gubernamental para que ganaran sus gallos”.

El Peje

Pos la tercera era la vencida y ganó, somos algunos milloncitos que no votamos por él, pero son muchos los milloncitos que sí.

Por el bien de todos ojalá le vaya bien, yo le deseo y que tenga mucha suerte, que Dios bendiga su camino es lo que quiero y que su mundo sea diferente, que encuentre alguien que le brinde amor del bueno (ah, no ésa era otra canción).

La coordinación de gobiernos de uno u otro color será aquella que en verdá nos ayude a los mexicanos y a nuestro país, quizá uno de los flagelos que serán siempre los causantes de la crítica social será la inseguridad; entiendo y espero que todos entendamos, que ninguna persona en el poder tiene una barita mágica que lo cambie, que desmantele los grupos delictivos en el país, que detenga los secuestro, homicidios, feminicidios, robos, extorsiones y de más chingaderas que aaaaah cómo nos joden. Es un trabajo que tomará tiempo y que espero, no sea tanto y los resultados sean evidentes pronto, pero sobre todo que los resultados no vengan membretados con sangre.

Es un reto muy cabrón el que enfrenta Andrés, un reto gigantesco y en verdad espero que logre cumplir su encomienda.

La Eva

Ésa, aquí sigue; chingando la marrana, pero aquí sigue y este fin de semana no hará tamales.